Desde Cáritas Jerusalén nos mandan esta carta que hemos querido compartir con todos vosotros. Desde allí, nos animan a trabajar juntos para poner en marcha acciones positivas que hagan posible la paz y la justicia en Tierra Santa.
Este es el texto íntegro del mensaje:
Queridos amigos y socios,
Desde el lanzamiento del proceso de paz en Madrid en 1991, el mundo ha visto interminables rondas de conversaciones con numerosos plazos que se establecen y luego expiran sin resultados efectivos sobre el terreno. A los palestinos todavía se les niega su derecho a la autodeterminación, la independencia y la soberanía.
• Los asentamientos son una violación del derecho internacional y constituyen obstáculos para la paz. Sin embargo, miles de casas se construyen cada año en tierras palestinas.
• El encarcelamiento de menores va en contra del derecho internacional, pero 331 menores palestinos están recluidos en cárceles israelíes como prisioneros y detenidos por motivos de seguridad.
• Los palestinos continúan siendo desplazados a causa de demoliciones de casas en el Área C de Cisjordania y en Jerusalén Este.
Estos son solo algunos ejemplos de violaciones que obstaculizan la convivencia, el diálogo productivo y la paz. Caritas Jerusalén está en contra del uso de la fuerza para resolver conflictos y la violación de los derechos humanos. Condenamos las demoliciones de casas, el encarcelamiento de menores, la expansión de asentamientos y la expropiación de tierras. Creemos que se deben buscar activamente todas las posibilidades de paz para detener la escalada de la violencia y la injusticia.
Todas las partes deben actuar de manera responsable y evitar acciones que socaven las perspectivas de negociaciones exitosas para que los jóvenes de hoy tengan perspectiva de futuro y disfruten de los frutos de la paz, la estabilidad y la seguridad.
Por lo tanto, pedimos a toda la comunidad internacional que trabaje conjuntamente para traducir la solidaridad expresada en el marco de esta jornada en acciones positivas para la paz y la justicia.
En este Día de Solidaridad, deseamos tan solo justicia, paz y reconocimiento de los derechos inalienables del pueblo palestino, así como una verdadera reconciliación entre los dos pueblos y las tres religiones que viven en Tierra Santa.
Gracias por sus oraciones, su solidaridad y apoyo en la búsqueda de justicia para el pueblo palestino.