El día 23 de octubre tuvo lugar un primer encuentro para reflexionar sobre el acompañamiento a familias en el territorio. El encuentro, que se celebró en el Centro Joaquín Roncal, contó con la participación de 35 agentes de Caritas Diocesana de Zaragoza, entre los que se contaban coordinadores, consiliarios y trabajadores sociales de las distintas zonas, tanto urbanas como rurales.
Los objetivos fueron: visibilizar las experiencias que se están dando en el territorio sobre el acompañamiento y promover una reflexión conjunta, compartida, en clave de acompañamiento, en dos direcciones: ser acompañante y ser acompañado.
En primer lugar, Isabel Ruiz, técnica de la Escuela de Formación y Voluntariado, preparó una presentación en power point donde nos transmitió las claves del significado de ACOMPAÑAR: “caminar al lado”, “estar con”, “apoyar procesos”, “reconocer cada logro”... Claves que nos ayudan a tener una mirada según el modelo de acción social de Cáritas que siempre pone a la persona como centro.
La formación nos invita a ver el eco e impacto que nos deja, a ser motores de cambio, a unir acogida y acompañamiento, a incorporar en las acogidas parroquiales nuevas formas de trabajo, a no quedarnos solo con la demanda-respuesta y a ir avanzando en los procesos de trabajo con las familias.
Se presentaron experiencias de acompañamiento reales que ya se están desarrollando de forma individualizada o grupal. Son un ejemplo las experiencias formativas de la zona de Alcañiz, Torrero y de Santo Dominguito. Todas ellas entendidas como procesos encaminados a dar paso a nuevas posibilidades, a tiempo de reflexión, de profundización y de ver dónde está nuestro compromiso, ¿qué ventanas abrimos?
Se compartió el proceso del equipo de acompañamiento de la zona de Las Fuentes como un paso más de lo asistencial a lo promocional, como testimonio de cómo generar vínculos y ser un recurso dentro de la comunidad. Labor que se realiza por parte del voluntariado de la zona con el apoyo de su trabajadora social.
También se trasmitió el aprendizaje colaborativo de acompañamiento grupal de la zona Centro, concretamente “Charrando con Caritas para crecer juntas” que promueve la participación de las mujeres, tanto en el diseño como en la presencia y liderazgo en las sesiones. Este proceso surge de los propios voluntarios con un enfoque grupal y comunitario. Se desarrolla en 7 sesiones impartidas por voluntarios, colaboradores y las propias familias, tratando temas de su interés (economía doméstica, pobreza energética, salud…)
Para finalizar, se realizó una dinámica en pequeños grupos para soñar nuevos escenarios y ver qué pasos podemos dar o ya estamos dando desde los equipos. El encuentro permitió dar respuesta a los objetivos planteados, con una valoración muy positiva y de calado para nuestros respectivos equipos y realidades.
Muy importante y a destacar fue la participación de los más alejados, la de nuestros queridos pueblos, que con sus preocupaciones, gran entusiasmo e interés por caminar en esta tarea del acompañamiento se acercaron también la realidad del mundo rural.
En definitiva, queremos alagar a este gran EQUIPO por su participación, compromiso y por los nuevos RETOS planteados.