02 octubre, 2019

Ayudas económicas: dignidad e integridad de las personas


En el año 2018, Cáritas Diocesana de Zaragoza atendió a 8.793 personas (3.727 hogares). Creemos en las potencialidades de la persona y en acompañarla en sus procesos. Hay veces –no siempre- que ese acompañamiento requiere, entre otras acciones, de una ayuda económica. 


La ayuda económica es un medio, no un fin en sí mismo, y esperamos que de una u otra manera cale el mensaje de que hay muchos tipos de pobreza; la ayuda monetaria ni siempre resuelve los problemas ni es la única solución. Por eso, a través de nuestro Servicio de Estudios Sociales y gracias al esfuerzo de los equipos en la recogida y sistematización de datos, podemos indagar en las causas de la exclusión social que se hallan detrás de esas necesidades económicas, así como de otras necesidades no económicas que necesitan solución. 

Durante el año 2018 se concedieron 9.809 ayudas económicas, por un importe de 1.214.534,75€. A lo largo de varias entradas de este blog, hablaremos de esas ayudas económicas en torno a los siguientes derechos humanos fundamentales: derecho a la dignidad e integridad, derecho a la vivienda digna, derecho a la salud universal, derecho a la educación para todos, derecho al trabajo decente. 

Cifras con rostro 

Hemos llamado “Dignidad e integridad de las personas” a este apartado en el que incluimos conceptos de ayudas económicas como alimentación, ropa o calzado, enseres variados (coche de bebé, cunas, etc.), documentación o trámites administrativos o civiles. 

La alimentación fue el concepto que más ayudas económicas concentró, alcanzando el 36,6% y casi la mitad de los recursos económicos destinados a éstas (46,4%). Fueron 3.586 ayudas que ascienden a 563.460,59 €. Representan 8 de cada 10 de las ayudas otorgadas y 9 de cada 10 € concedidos. Destacamos las 435 ayudas para ropa y calzado por 28.758,72 €, que supuso 1 de cada 10 ayudas concedidas en este apartado. 

Titulamos estos números con el nombre de un derecho humano fundamental para no olvidarnos de que son cifras con rostro, para recordar que detrás de ellos hay personas. También, para que entendamos que dichas ayudas están contextualizadas no solamente en el marco de una intervención y acompañamiento social más amplio, sino también en relación con nuestra misión de abogar siempre por la dignidad de la persona. 

En próximas entregas de este blog seguiremos explicando las ayudas económicas realizadas a lo largo del pasado año. 

Puedes encontrar esta información de forma ampliada en la Memoria 2018