El pasado 13 de febrero, Marisa López, trabajadora social de Cáritas Zaragoza especializada en temas de migración y refugió impartió una sesión de formación a los voluntarios de Cáritas de la zona de San Valero. Raquel Montero, su técnico de referencia, nos ha contado para el blog todo lo que aprendieron.
A mediados de 2018, tras un pequeño periodo en el que atisbábamos una leve mejoría y las personas que atendíamos en las caritas parroquiales encontraban pequeños empleos que les permitían vivir de manera más digna, volvimos a atender en nuestras acogidas parroquiales a un gran número de personas que están llegando a nuestro país huyendo de conflictos armados en sus países, del hambre, la carencia de medicación o simplemente buscando una vida mejor. En ocasiones solos, pero también acompañados por sus parejas e hijos. Al principio fue un goteo que poco a poco se ha convertido en una fina lluvia que no cesa, semana tras semana hermanos de Nicaragua, Venezuela, El Salvador, Brasil, Costa Rica… acuden a nosotros en busca no solo de ayuda económica, sino también escucha y orientación. Al mismo tiempo continúan llegando primero a nuestras costas y luego a las ciudades de interior desde África gentes que buscan poder vivir con dignidad y en libertad, huyendo de la pobreza, el hambre y la violencia que asola muchas zonas del continente africano y que sale muy poco en los medios de comunicación.
Ante esta tormenta, como agentes de Cáritas nos encontrábamos un poco perdidos, escasos de información y herramientas, que nos permitieran desde las Cáritas parroquiales ayudar de la mejor manera a todas estas personas.
En base a esta realidad hemos realizado una sesión de formación con el objetivo de conocer las diferentes posibilidades de documentarse tanto de la gente que lleva un tiempo en España como de los recién llegados, el sistema de acogida para solicitantes y beneficiarios de protección internacional de ACCEM y los recursos sociales de la Casa de las Culturas, así como unas pinceladas que nos recuerdan nuestra tarea, los criterios de concesión de ayudas y los principales recursos de la zona.
La valoración por parte de todos participantes ha sido muy positiva ya que nos permite mejorar en nuestras actuaciones, atender con más conocimiento a las personas y por la tanto ser instrumentos para lograr una sociedad mejor y más justa. Porque siempre es momento de seguir aprendiendo, continuaremos formándonos.
Agradecemos a Raquel y a todos los voluntarios de la zona haber querido compartir su experiencia para este blog. Y les damos las gracias por la fantástica labor que realizan en la zona de San Valero.