Muchas veces nos ponemos serios, porque hablamos de pobreza y exclusión social, denunciamos injusticias y ponemos cifras a realidades muy duras que vemos todos los días.
Pero nuestros días también están llenos de sonrisas: las que sembramos y las que nos plantan en el corazón, las que brotan porque sí en la convivencia, o en las actividades que realizamos (jornadas de puertas abiertas, sesiones de trabajo en el huerto, talleres artísticos, actividades de cocina, celebraciones de días festivos, andadas, mercadillos de comercio justo, etc).
La vida se abre camino pese a todo y, con ella, también la alegría. Por eso os presentamos esta imagen de Fátima y Cristina: hoy sus sonrisas son nuestros mejores influencers.
Foto realizada por nuestro voluntario, Jesús Tejel.