Cáritas
Diocesana de Zaragoza recibió el pasado 28 de enero la visita de los alumnos y
profesores del Colegio Hijas de San José. El colegio había organizado una Semana Solidaria en la que habían trabajado temas de consumo responsable y voluntariado. Posteriormente organizaron un festival solidario y recaudaron unos fondos que entregaron en Cáritas el día de la visita. Los recibió y acompañó en la misma Teresa Pérez, del proyecto de educación en valores "Educar la Mirada".
El día 4, en El Periódico del Estudiante -publicación de El Periódido de Aragón dedicada a la educación- publicaron el texto que reproducimos a continuación:
El día 4, en El Periódico del Estudiante -publicación de El Periódido de Aragón dedicada a la educación- publicaron el texto que reproducimos a continuación:
El pasado 28 de enero algunos
chicos del colegio Hijas de San José junto con sus profesoras Ana Julia, Rosa y
Merche decidieron voluntariamente representar a su centro para la entrega en la
sede de Cáritas de parte del dinero recaudado en la semana solidaria. Fuimos
dispuestos a dar pero fue más lo que recibimos.
Teresa nos acompañó muy
amablemente durante toda la visita. Empezó diciéndonos que le encantó todo lo
que habíamos hecho durante la semana solidaria, sobre todo cómo nos habíamos
acercado a la experiencia del voluntariado. Nos transmitió que la clave es ser
generosos con nuestro tiempo, ser capaces de ponernos en la piel de los demás,
creer que ya con nuestros pequeños gestos cotidianos somos capaces de cambiar
el mundo.
Nos explicó la labor de Cáritas y
de todos sus voluntarios y trabajadores. Nos hizo ver que Cáritas es Iglesia,
pero que representa y atiende a todos independientemente de su credo, porque
esta organización sobre todo cree en las personas y en que el amor es, o
debería ser, el motor del mundo.
También nos encantó que nos
dijera que Cáritas cuenta con los jóvenes y que nos quiere dar la oportunidad
de expresarnos porque no sólo somos futuro, sobre todo lo que somos es presente
y ya nosotros tenemos en el día a día que luchar no por la caridad sino por la
igualdad de derechos. Porque Cáritas en su labor no juzga, por el contrario lo
que hace es mirar y potenciar las capacidades de las personas, sobre todo de
aquellos a los que nadie escucha.
Nos hizo caer en la cuenta de que
nuestra estructura social deja, de entrada, al margen a una parte de la
sociedad, lo que aumenta las desigualdades. Hay que cambiar la perspectiva y
poner nuestra mirada no en el dinero, sino en las personas.
Teresa nos habló también del
consumo responsable y le encantó saber que nosotros también habíamos realizado
actividades en ese sentido antes de la Navidad. Como tantas veces nos han dicho
nuestros padres y profesores, el dinero no da la felicidad, la felicidad
auténtica y duradera la dan las personas, el ser y no el tener.
Por todo esto, en nuestra vida,
es muy importante saber elegir el camino adecuado ya que hay muchos que no
llevan a ninguna parte. Hay que apostar por la esperanza, hay que ser
esperanza.