26 septiembre, 2018

La lucha por una vivienda digna

La vivienda constituye uno de los elementos más esenciales para la vida del ser humano. Junto con la alimentación y el vestido conforman lo indispensable para el desarrollo individual y social de la persona así como de su familia. 

En los últimos años la crisis de nuestro país ha derivado en el incremento de la tasa de paro, la precariedad laboral, así como la caída de salarios la cual ha aumentado el problema de la vivienda en España.
En este ámbito nos encontramos con numerosos casos de familias que no pueden acceder a una vivienda digna, en muchos casos aun teniendo ingresos, debido a su alto precio. Así mismo, también existen familias que teniendo un alojamiento donde vivir, no reúnen las condiciones de habitabilidad mínimas y no disponen de medios para su adecuación.

Los jóvenes, los inmigrantes, las personas mayores y, en general, las personas con rentas bajas son las que más se ven perjudicadas, ya sea por la intensidad con que se ven afectados o por la especificidad de los problemas que padecen. Los jóvenes se ven afectados por tasas de paro y eventualidad muy elevadas. Los inmigrantes padecen situaciones de vulnerabilidad por la situación jurídica de muchos de ellos, acompañado de situaciones laborales irregulares. También se ven afectados por problemas como el hacinamiento y la exclusión o segregación espacial.

Conscientes de esta realidad, desde Cáritas se trabaja y sensibiliza sobre la problemática de la vivienda en general y más concretamente con aquellas personas que se encuentran en situación de pobreza económica y tienen necesidad de un hogar. Para ello facilitamos herramientas para que las personas en situación de exclusión social puedan acceder o mantener una vivienda digna. Así mismo apoyamos y acompañamos a personas  en situación de sin hogar.

En definitiva pretendemos que las personas que han caído en una situación de exclusión social por falta de vivienda participen en procesos de promoción e inserción social que les permitan, de nuevo, tomar las riendas de su vida, acceder a un hogar y ser los protagonistas de una mejora en su calidad de vida. Asimismo, incidimos en la transformación de estructuras generadoras de la exclusión residencial desde el trabajo en red, la sensibilización y la denuncia.