Campaña de Navidad. 1976
En 1972 es nombrado Director de Cáritas Francisco Villarejo para el que tenemos hoy un recuerdo muy especial pues falleció hace unos días.
Cuando Francisco Villarejo se hizo cargo de la dirección de Cáritas, a instancias de Mariano García Cerrada, se marcó un objetivo claro: Cáritas debía ser un instrumento dedicado totalmente a la promoción social; algún tiempo más tarde se unió a este objetivo el de la denuncia. Era partidario de que Cáritas no tuviera obras propias; Cáritas colaboraba en los estudios iniciales, ayudaba a ponerlas en marcha pero después tenían que ser otros los que las continuaran.
En estos años se comienza un importante trabajo con los transeúntes, problema de gran incidencia social en ese momento.
Se realizó una importante labor de captación de socios que asegurasen los ingresos de la institución y se abandonaron las cuestaciones callejeras.
Campaña de captación de socios. 1972
La situación social en Zaragoza no era buena: el paro, las zonas marginales en la ciudad, muchas viviendas en malas condiciones y la situación muy preocupante de los ancianos. En esta época se pone en marcha el servicio de ayuda a domicilio; primero fue la comida y después los servicios de limpieza, aseo y compañía. La Caja de Ahorros de la Inmaculada financió la puesta en marcha de este servicio.
La Comunicación Cristiana de Bienes presidió esta época en la que se dio más importancia a la “caridad promocional” que a la “caridad asistencial”. En algún momento incluso de planteó dejar de publicar la “Hoja de Caridad”
La situación de los equipos parroquiales era desigual; mucho más dinámicos los de los pueblos –donde los curas eran muy jóvenes- que los de la ciudad. Los equipos de voluntarios eran escasos y se procuraba atender a su formación con cursos que se organizaban en torno al Día de Caridad.
El equipo de trabajo de Cáritas Diocesana estaba formado por un Consejo Rector –Director, Subdirector, Delegado Episcopal y Responsable Económico- y un pequeño grupo de 2 o 3 personas contratadas.
En 1975 es nombrado Director José Luis Batalla en un momento complejo para España y con una situación social complicada en la que Cáritas tuvo que manifestarse públicamente en determinadas reivindicaciones sociales.
Resolver la dialéctica entre atención asistencial y promoción social fue el eje del mandato de José Luis Batalla. Suya fue la idea de publicar la primera Guía de Recursos Sociales y suya también la idea de idear las campañas explicando un problema social y buscar una solución para el mismo. De su época es una de las más brillantes campañas que se han hecho en Cáritas y que ilustra este escrito.
En este período como en el anterior es necesario destacar la labor de Mª Pilar Martínez, Secretaria General de Cáritas, que coordinaba a todo el equipo y trasmitía la línea a seguir y mantenía la continuidad en la institución.
Mª Pilar Martínez, Secretaria General de Cáritas
En esta época se van definiendo los Departamentos: Desarrollo Institucional, Mª Dolores Pérez se ocupa del de Ancianos, MªPilar González del de Transeúntes, Josefina Foncillas del de Administración Económica; y así hasta 7 personas contratadas, todas ellas mujeres. Hay que hacer una mención especial al equipo de Asesoría Jurídica.
Funcionaban de manera bastante aceptable los Consejos Urbano y Rural.Los equipos parroquiales van adquiriendo una mayor importancia –tienen entre 4 ó 5 – miembros y se dedican a tareas asistenciales.
En esta época se creó Cáritas Aragón que reunió a todas las Cáritas de Aragón en un momento de claro resurgir autonómico en toda la región.
Comienzo de la campaña para la erradicación del chabolismo. 1979
La denuncia preside todo el mandato de José Luis Batalla, involucrándose hasta el final en la defensa de los más pobres; el proceso de erradicación de chabolismo se inicia en el último año del mandato de este Director.
Francisco Villarejo, Director de 1972 a 1975
José Luis Batalla, Director de 1975 a 1979
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