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| El presidente de Cáritas Aragón y el secretario general en una imagen de archivo |
Cáritas apuesta por
garantizar el acceso a una vivienda digna fomentando el alquiler para las
personas con menos recursos
El pasado día 11, en el marco de unas Jornadas sobre
Urbanismo y Crisis Financiera, los representantes de Cáritas, Carlos Sauras,
presidente de Cáritas Aragón y Frank
Yagüe, secretario general, manifestaron la apuesta decidida de Cáritas por garantizar el acceso a una
vivienda digna, fomentando el alquiler, para las personas con menos recursos.
Reclamaron, además, un parque público para que estas personas puedan acceder a dicho alquiler.
En su exposición hablaron de la vivienda como “hogar”, elemento
fundamental para el desarrollo personal y familiar y manifestaron la importancia de la vivienda en
los procesos de exclusión o de inclusión social .
Expusieron, además, cómo el derecho a la vivienda ha estado
condicionado a los movimientos especulativos del mercado enormemente
desregulado.
La apuesta de Cáritas es garantizar el acceso a una vivienda digna
fomentando el alquiler, teniendo en cuenta que: 1) hay un insuficiente parque
de vivienda de alquiler público; 2) existe la imposibilidad del acceso a la
vivienda social de alquiler por bajos ingresos; esto llevaría a la creación de
un tipo de alquiler social barato; 3) se debería implementar ayudas directas para el
alquiler a familias en situación de vulnerabilidad y exclusión social.
Así pues, desde Cáritas se hace una apuesta por el fomento
del alquiler y de la rehabilitación. El
derecho a la vivienda es un derecho constitucional y debe ser garantizado
mediante políticas activas de regulación de su acceso frente a los movimientos
especulativos del mercado.
Si la Administración tuviera o gestionara un parque adecuado
de viviendas de alquiler se evitaría el abuso y la explotación de los
colectivos que tienen dificultades de acceso a la vivienda; se facilitaría,
además, el acceso a la vivienda de los jóvenes adelantando su emancipación; se
regularía, por fin, el mercado de la vivienda, despojándolo de su componente
especulativo y adaptando los precios a
la realidad.
Los dos representantes de Cáritas dejaron muy claro que la desigualdad se ha enquistado en
nuestra estructura social y se aportaron unos datos que lo ilustran: las 5.122
familias atendidas en 2012, frente a las 4.504 del año anterior, que suponen
11.500 personas frente a las 7.700 de hace un años; las ayudas económicas de
2011 a 2012 se han multiplicado por 7.
Han asegurado, también, que la brecha entre las rentas más altas y las
más bajas es cada vez más grande, llegando en estos momentos a que un 28 % de
la población es pobre en nuestro país.
El director de Cáritas concluyó destacando la gran trabajo de
solidaridad que en estos 5 años de
crisis han llevado a cabo los voluntarios y trabajadores de la organización,
así como un gran número de ciudadanos; terminó valorando muy positivamente la fortaleza de la familia que en estos
momentos es un elemento de acogida y amparo.
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