15 julio, 2014

Se extiende la red de contenedores para ropa usada en el Bajo Aragón






      El pasado día 10 de julio, en Calanda, se procedió a la presentación de la red de contenedores de ropa usada que se están instalando en la zona del Bajo Aragón. Gracias a la colaboración del Ayuntamiento de Calanda,  la  comarca se suma a este proyecto de Economía Social y Solidaria.

      Participaron en la presentación: José Ramón Ibáñez, Alcalde de Calanda,  el Equipo de Cáritas Parroquial de Calanda y Francisco Yagüe,  Coordinador de la Fundación por la Inclusión Social de Cáritas Diocesana de Zaragoza.

     Cáritas Diocesana de Zaragoza, en colaboración con Cáritas Diocesana de Teruel – Albarracín y el Ayuntamiento de Calanda,  amplía la red de contenedores para la gestión de ropa de segunda mano que generará empleo con criterios éticos y medioambientales.

     El Ayuntamiento y el equipo de Cáritas de Calanda se suman a la apuesta decidida por la generación de empleo para personas en situación de vulnerabilidad o exclusión social y el cuidado del medioambiente.

     Calanda cuenta ya con dos contenedores para el tratamiento de ropa y otros residuos textiles, gracias a la colaboración entre Cáritas y el municipio. Este proyecto permitirá la mejora de la gestión de ropa para la entrega social que realiza el equipo de Cáritas calandino y, a su vez, se suma a los esfuerzos del cuidado por el medioambiente a través de la recuperación y reciclaje textil.



      Se trata de un proyecto cuyo objetivo es generar empleo de inserción. Todos los procesos que intervienen en la recuperación o reciclaje textil son la base para la generación de empleo. Así, la recogida y preparación de la ropa, bien sea para entrega social, venta o exportación al tercer mundo, se convierten en una oportunidad para la creación de puestos de trabajo. Cuanto más volumen de ropa o textil se obtenga, mayores posibilidades para ello. 

      No hay ninguna condición para recoger las prendas textiles. Puede ser ropa en buen o mal estado, manteles, cortinas, mantas, etc. Todo ello será clasificado en plantas de reciclado comunes de Cáritas que surtirán localmente la ropa necesaria. En todo momento, se garantiza un destino ético de la ropa.

       La colocación de contenedores se ha realizado gracias a la colaboración del Ayuntamiento de Calanda, el equipo de Cáritas Parroquial de Calanda y las Cáritas Diocesanas de Zaragoza y Teruel - Albarracín.


07 julio, 2014

El equipo del Proyecto de Cárcel va de excursión







Acogida, cercanía, fraternidad, presencia, comunión… fiesta de la Caridad.
Construyendo juntos espacios de esperanza. Así fue nuestra excursión.

Comenzamos nuestro día sin saber lo que íbamos a vivir. Fuimos llegando poco a poco y fue una alegría grande encontrarnos con la familia de Francisco. Cada uno llevó su especialidad, lo mejor de sí para disfrutar de la convivencia.
         Medio de transporte, la  camioneta de la Residencia de Santa Teresa y el coche de Caritas que nunca falla. Nuestros pilotos, Julio y Teresa Narbona.
         Salimos camino del monasterio de Veruela donde hicimos nuestro primer alto en el camino. Nuestras guías: Espe y Elena. Aparcamos, caminamos y  encontramos un  lugar para nosotras. Nos sentamos alrededor de unas mesas y, al aire libre, mientras desayunábamos, nos dieron la primera sorpresa que nos habían preparado. Abrieron una caja forrada de azul oscuro y cada uno fue invitado a coger un sobre blanco con un mensaje de bienvenida dentro: 

“Has aceptado la invitación para venir a la excursión.
Quieres disfrutar del aire libre, buena comida compartida,
una compañía que te hace reír y compartir experiencia de vida.
Por eso tú has traído a este viaje una….
Visera, unas gafas de sol, una mochila, una manta...”
¿Qué has traído para el camino?

Y después caminamos hasta el monasterio de Veruela con visita guiada. Precioso el monasterio cisterciense de Santa María de Veruela, en las faldas del Moncayo y fundado en el siglo XII. Han pasado muchos años y hoy podemos admirar el arte que expresaba un modo de vivir propio de la orden monástica cisterciense. Sorpresa, admiración, ojos y corazón abiertos para percibir y dejarnos sorprender… Admiramos el claustro, centro del monasterio. Recorrimos lo que fue cocina, refectorio, el lugar de estudio, la Iglesia de la abadía, torre medieval, capilla de la virgen Aparecida, la puerta que daba a la huerta de los monjes. La regla de san Benito ordenaba la vida de los monjes con su “ora et labora”. Es todo un conjunto de belleza que aquieta el alma e invita a contemplar en silencio. Sentido profundo de quien es Dios y quien la criatura. Toda una obra de arte.
Y de Veruela nos fuimos en coche al Parque Natural del Moncayo. Llegamos a Agramonte y allí tuvimos nuestra primera “lección” sobre las bellezas que este parque encierra. A lo lejos San Miguel desde donde podíamos vislumbrar el santuario de la Virgen del Moncayo. Teníamos muchas ganas de ver de cerca el monte y de  disfrutar juntos de su belleza natural. Contemplamos tres de los glaciares que se van formando como consecuencia de la nieve acumulada cada año, la diversidad de árboles según la altura que alcanzábamos: encinares, rebollares y hayedos, acebos, matorrales, romero, coscojas, aliagas… Se nos despertaron todos los sentidos: ojos, oídos, corazón, tacto, olfato para no perder nada de lo que la naturaleza nos regalaba. Aquí nos hubiéramos quedado, para contemplar y agradecer…
Y después de un buen rato de disfrute comenzamos nuestro descenso en busca de un lugar para comer. Descubrimos unas mesas y allí nos quedamos. Empezamos a sacar los manjares exquisitos elaborados por el equipo para disfrutar y gustar de lo que cada una hace mejor: ensaladilla, empanadas, tortillas, dulces y trenzas típicas, buen vino y diversidad de bebidas.  Nos fuimos haciendo conscientes y nos acordamos de tantos hermanos nuestros que pasan hambre y no tienen nada que comer. No faltó un cafecito para reposar la comida.


Por fin llegó la hora de coger nuestra manta y de extenderla sobre el suelo. La actividad consistía en tumbarnos boca arriba y contemplar la naturaleza. Tener un tiempo largo para entrar en silencio  y contemplar lo que teníamos  a nuestro alrededor.  Sin prisas nos hicimos conscientes de la luz, los árboles, el movimiento de las nubes, el cantar de los pájaros, la brisa suave que nos serenaba… y así en silencio disfrutamos juntos y conviviendo de distintos modos.
¿Qué pasó en nosotras? Compartimos y nos llenamos de alegría, de haber tenido la oportunidad de vivir un día en que el acompañamiento del equipo para el equipo es posible también de este modo. Nos comunicamos más, nos sentimos más cerca, más unidas, más en solidaridad.  Construyendo juntos espacios de esperanza.
Después de todo esto nos fuimos a Tarazona y visitamos la catedral, una verdadera joya de arte. La ciudad estaba de fiesta medieval y pudimos apreciar además la belleza de la época.
GRACIAS a todos es la única palabra que nos queda en el corazón y… echamos en falta a los que no pudieron estar.




01 julio, 2014

Cáritas apuesta por el empleo a través de la gestión de la ropa usada

Jaime Sanaú, director de Cáritas Zaragoza y Frank Yagüe, coordinador de la Fundación




        En la ciudad de Zaragoza se colocan una  red de contenedores que generarán empleo para personas en situación de vulnerabilidad o exclusión social
       En rueda de prensa, se ha presentado hoy esta iniciativa de Cáritas que supone una apuesta por el empleo a través de la ropa usada.  El Director de Cáritas Zaragoza, Jaime Sanaú y el Coordinador de la Fundación por la Inclusión Social, Frank Yagüe, ha presentado el proyecto a los medios de comunicación.
      Cáritas Diocesana de Zaragoza ha iniciado la colocación de una red de contenedores para la gestión de ropa de segunda mano que generará empleo con criterios éticos y medioambientales.
      Con ello Cáritas Diocesana de Zaragoza, a través de su Fundación por la Inclusión Social, realiza una apuesta decidida por la generación de empleo para personas en situación de vulnerabilidad o exclusión social. En un momento donde los índices de pobreza continúan incrementándose debido al desempleo.
      La recuperación de ropa usada y otro tipo de textiles es una oportunidad para la creación de empleo de personas que necesitan apoyo en sus itinerarios de inserción. Esta actividad, no ajena a la tradición de Cáritas, se configura en este momento como una alternativa ética, donde la trazabilidad de la ropa está garantizada a través del control de todos los procesos de recuperación o reciclaje dentro de la red de Cáritas.

     Tres son los objetivos prioritarios de este nuevo proyecto:

1.        La generación de empleo: apuesta de Cáritas como empresa de inserción.
2.        El cuidado del medio ambiente: actividad de reciclaje
3.        El desarrollo de criterios éticos: gestión ética de la ropa.

    La Empresa de Inserción de Cáritas “A todo Trapo S.L.U.” será la encargada de gestionar la ropa u otras piezas textiles que se depositen en los contenedores. Todos los procesos que intervienen en la recuperación o reciclaje textil son la base para la generación de empleo.  Tanto la recogida, como la preparación, bien sea para entrega social, venta, o exportación al tercer mundo, se convierten en una oportunidad para la creación de puestos de trabajo. Cuanto más volumen de ropa o textil se obtenga, mayores posibilidades para ello.

Trabajadores de la empresa de inserción (1º y 3º de izda. a dcha.)
   
    No hay ninguna condición para recoger las prendas textiles. Puede ser ropa en buen o mal estado, manteles, cortinas, mantas, etc. Todo ello será clasificado en plantas de reciclado comunes de Cáritas que surtirán localmente la ropa necesaria tanto para la entrega social como para la venta. De esta manera, en todo momento, se garantiza un destino ético de la ropa.
   La colocación de contenedores se inicia paulatinamente. En general, las parroquias de la ciudad de Zaragoza vinculadas al proyecto, dispondrán de contenedores, al menos de cartón, para la recogida. También se contará con contenedores metálicos ubicados tanto en centros deportivos como Stadium Venecia, Casablanca o Club de Tenis, como en instituciones y entidades como Universidad San Jorge, Fundación San Valero y otros.