Empresas, valores y personas

(Las fotografías del acto han sido cedidas por ADEA)

La Asociación de Directivos y Ejecutivos de Aragón – ADEA- organizó el pasado día 14 una nueva sesión dentro de sus Jornadas Técnicas, actividad cuyo objeto es profundizar en temas de actualidad, con la aportación de las visiones de diferentes ponentes y con la participación de un reducido grupo de directivos relacionados con el tema.Ha asistido el Director de Cáritas Diocesana, Carlos Sauras, en virtud del convenio de colaboración que mantienen ambas entidades.

El tema, en esta ocasión, ha sido “Empresas, personas, valores”, que adquiere mayor interés en estos momentos, en los que se está dando especial importancia a la gestión de las personas y el talento.

Para abordar esta jornada, ADEA ha contado con dos ponentes expertos en la materia: Nuria Chinchilla (profesora del IESE Business School y asesora de alta dirección) y José Manuel Casado (presidente de 2.C Consulting y Distinguished Clinical Professor del IE).




Nuria Chinchilla bajo el título “El triángulo de la sostenibilidad”, ha hablado de los valores necesarios en la sociedad para contribuir al capital humano y al capital social, “son necesarias personas equilibradas y maduras como base de las familias y de las empresas”.

Nuria Chinchilla también ha citado como necesarios en las personas cinco intangibles, que son el realismo, la proactividad, la solidaridad, responsabilidad y la esperanza, necesarios para levantar y sostener el país.

José Manuel Casado, bajo el título “Los secretos del talento”, ha centrado su ponencia en los siete secretos relacionados con el talento, esenciales para que las personas y las organizaciones consigan los mejores resultados. “Estos secretos tienen que ver con el contexto de trabajo, con la motivación, las expectativas y la edad, con el descubrimiento de los que son extraordinarios, con la importancia del esfuerzo…”.

Al finalizar el coloquio, y en virtud del convenio entre ADEA y Cáritas Diocesana de Zaragoza (fruto del interés de ambas entidades por aunar esfuerzos para acercar la solidaridad y ética empresarial al mundo de los directivos), el director de Cáritas Diocesana de Zaragoza, Carlos Sauras, ha participado en dicho coloquio, formulando a los ponentes una pregunta relacionada con la labor que los directivos pueden realizar para apoyar las capacidades de las personas excluidas.

A la pregunta, Chinchilla ha propuesto como misión específica de las empresas, “el desarrollo de la capacidad humana no sólo hacia afuera, más propio de las acciones de marketing, sino hacia adentro, abriendo puertas y apoyando a los excluidos”. Casado, por su parte, ha resaltado la necesidad de reinventar el capitalismo, con elevadas dosis de solidaridad.


Las ponencias pueden escucharse aquí

BSH dona a Cáritas el importe de las felicitaciones navideñas para el proyecto de actividad ocupacional

El subdirector general del área económica de BSH Electrodomésticos España, Joaquín Franco entrega al talón correspondiente a la donación a Alberto Ruiz, Secretario General de Cáritas Diocesana de Zaragoza y Pedro Cotera, Coordinador de Empresas con Corazón.


Las tradicionales tarjetas navideñas que BSH Electrodomésticos España enviaría en estas fechas a sus clientes, proveedores y colaboradores se han convertido un año más en dinero contante y sonante destinado a una asociación benéfica. En esta ocasión, los 6.000 euros de esas felicitaciones se han entregado a Cáritas Diocesana de Zaragoza para el desarrollo de su programa de “actividad ocupacional protegida”. Joaquín Franco, Subdirector General del área económica de BSH Electrodomésticos España entregó el correspondiente talón a Alberto Ruiz, Secretario General de Cáritas Diocesana de Zaragoza, acompañado por Pedro Cótera , coordinador de Empresas con Corazón (Cáritas). A través de este proyecto, Cáritas, trata de potenciar la mejora de habilidades sociales y competencias personales de los participantes, así como desarrollar sus capacidades y destrezas mediante el aprendizaje de distintas técnicas manuales. El objetivo último de estas actuaciones para la motivación y habituación laboral es facilitar la integración, formación y desarrollo de una ocupación de aquellas personas que precisan una intervención adaptada a su situación, para mantener o avanzar en la adquisición de hábitos sociales básicos y nivel de empleabilidad.
Para acceder al programa de actividad ocupacional, es necesario haber pasado por un proceso motivacional -en los talleres “San Pablo” o “Fogaral”-, o de habituación laboral, en el Centro de Inserción Social o en la Granja de Reinserción de Transeúntes, que Cáritas tiene en Zaragoza y en Movera. El equipo de referencia del centro valora quiénes han cumplido los objetivos y estima necesario que participen en un proceso más largo y lento que se adecue a su situación.
En el programa iniciado en el mes de octubre de 2007 participan 20 personas, con una edad mínima de 45 años y una máxima de 65, si bien el mayor determinante no es la edad sino el grado de deterioro y baja empleabilidad. Su presupuesto es de 50.085 euros, y de su puesta en marcha se encarga una coordinadora y una educadora contratadas, y ocho voluntarias que desarrollan tareas de ejecución y apoyo en el resto de actividades.
Los talleres se realizan en dos grupos de trabajo, según las habilidades sociales y manuales; el deterioro de la salud -en los dos es elevado-; las dificultades sensoriales y motoras; nivel cultural -en algunos casos de analfabetismo y bajo nivel de neolector-; demanda de actividades, sobre todo manuales en ambos grupos; el grado de asistencia; el grado de atención y memoria; y también el deterioro de la salud. Las actividades se dividen en dos áreas: en la de crecimiento personal se trata de crear un espacio “acogedor” de referencia y de formación personal y en el área ocupacional se trabajan los hábitos de empleabilidad.