El día 10 de Junio celebramos el día del Corpus Christi; en este día recordamos a Jesús como ya hicimos en el Jueves Santo, rememoramos la Eucaristía y su presencia en el pan de la comunión; este día está rodeado de muchos mensajes que no pasan con el tiempo y que en momentos como los actuales también cobran un mayor sentido: sentimientos de compartir y repartir, tiempo de estar con quien a nuestro lado más lo pueda necesitar, tiempo que regalar en voluntariado... el concepto de la gratuidad, saber apreciar las cosas por el valor propio de ellas y no solo por lo monetario. Es el gran día de celebración para Cáritas, es el día de la Caridad.
Como todos los años la celebración del Corpus marca el final del curso, los niños y niñas que han hecho la Primera Comunión reviven ese día de unión con Cristo, se visten con sus mejores galas y acompañan después de la misa al Santísimo en la custodia, en su procesión por las calles de Zuera donde algunas personas del pueblo han construido altares que harán de paradas donde se alojara al cuerpo de Cristo en un momento de recogimiento, oración y adoración.
En el día del Corpus celebramos el día de Cáritas y, desde el año pasado, los niños y niñas de Primera Comunión se convierten en sus embajadores. Este año las catequistas les presentaron a un nuevo compañero, Caritú, la mascota de Cáritas formada por los corazones de quienes quieren ayudar y que nos guiará en nuestro camino de compromiso, sensibilización y evangelización.
Se preparó un altar muy especial para acoger al Santísimo, en el que aparecían dos Caritús vestidos de Primera Comunión, rodeados por los nombres de los niños y un enorme corazón como sagrario. Se pidió a los niños que escribieran en un papel un compromiso o un mensaje de esperanza; estos fueron metidos en globos y, el día de la procesión, cuando ésta llegó al altar, y después de la oración, estas peticiones se elevaron al cielo con el respectivo gozo de los chavales.
P.D. Reseña enviada por el técnico del Arciprestazgo, Luis Moreno
