El sábado 19 de noviembre de 2016 tuvo lugar en el salón de actos de la Casa de la Iglesia el Encuentro Diocesano de Cáritas Zaragoza bajo el lema "Llamados a Ser Comunidad". El acto, presidido por don Vicente Jiménez Zamora, arzobispo de Zaragoza, y por el director, Jaime Sanaú, contó con la asistencia de más de 70 personas, entre trabajadores, miembros del Consejo Diocesano de Cáritas, sacerdotes y animadores de las Cáritas Parroquiales.
Tras una breve oración dirigida por el consiliario de la entidad, Gonzalo Gonzalvo Ezquerra, se dio paso a la ponencia central que corrió a cargo del arzobispo de Zaragoza. El tema central de la jornada, muy ligado a la Campaña que la próxima Navidad lanzará Cáritas, fue la Laudato Si’, desde el compromiso y corresponsabilidad como cristianos, miembros de la comunidad diocesana y como agentes transformadores en las distintas realidades sociales (familia, trabajo, parroquia…) D. Vicente Jiménez Zamora realizó en menos de una hora, una exposición transversal y en profundidad de la encíclica, haciendo especial mención a la necesidad de sobriedad, honradez y religiosidad, como base de nuestro compromiso cristiano con nosotros mismos, con los demás y con Dios.
Tras un breve descanso, la secretaria general, Cristina García, presentó las experiencias significativas elegidas para este año. ¿Pero son las experiencias significativas? Es algo pequeño, sencillo, cargado de esfuerzo, nunca insignificante, que a veces pasa desapercibido pero que hay que compartir. Pero, sobre todo, es testimonio y por ello, cuatro acciones se eligieron para ser presentadas durante el encuentro a cargo de sus propios protagonistas.
La primera acción significativa en presentarse fue “El derecho a la información de los olvidados”. Taller de finanzas básicas. Corrió a cargo del responsable voluntario del itinerario de inserción social, Juanjo Santos. Una iniciativa de formación dirigida a ayudar a las personas a entender algunos conceptos, a saber cómo planificarse y a mejorar a largo plazo a prever los acontecimientos que supongan un gasto económico. Una iniciativa de trabajo en red que se ha visto reforzada con los talleres de ahorro energético impartidos por Cáritas o cursos impartidos por otras entidades también muy interesantes. Juanjo destacó que “esta pequeña obra junto a muchas otras pueden realmente cambiar el mundo”.
La segunda de las experiencias fue “Ganar o no ganar, esa NO es la cuestión. Jugar para disfrutar o el equipo hace la fuerza” fue presentada por Ana Cristina y Patricia, directora y terapeuta respectivamente, del Centro de Rehabilitación Psicosocial San Carlos. Se desarrolló la iniciativa de implementar la práctica del futbol para personas con TMG (trastorno mental grave). La creación de este equipo también incluye la participación en la liga de entidades sociales y en el “mundialito”. Una forma de potenciar la autoestima, de fomentar la actividad física en personas con estas patologías, la mejora de la autonomía personal, del trabajo en equipo… Una actividad que sale adelante gracias a la labor de las terapeutas y de los voluntarios que colaboran.
La tercera acción significativa fue presentada por tres componentes del Equipo de la Cáritas Parroquial de Ejea de los Caballeros: Miguel Angel, Mª Carmen y Arantxa, la técnico. A través de un fantástico video-reportaje dieron testimonio de este gran proyecto de apoyo escolar: “La huella del trabajo colaborativo. Enseñar para aprender”. Gracias a este recurso pudieron dar voz a todos los agentes que participan en la actividad y calaron entre los asistentes al encuentro.
La cuarta y última acción significativa presentada en el Encuentro Diocesano fue “Hacer comunidad, tejiendo redes”. O lo que es lo mismo el proceso formativo de la Zona de Las Fuentes junto al Colegio Santo Domingo de Silos. Corrió a cargo de la técnico de zona, Sonia Trigo, acompañada por el responsable de pastoral de la obra diocesana, José Luis Aldea, y Alvaro Franch, consiliario que acompaña a los equipos de Cáritas en el barrio de las fuentes. Una iniciativa que ha ido creciendo hasta implicar no sólo al alumnado, sino también al profesorado, y que abarca no sólo la formación sino también a la intervención conjunta con las familias.
